2 yemas de huevo duras, presionadas a través de un tamiz fino
2 tazas de harina
1 taza de queso parmesano, finamente rallado
1 cucharadita sal, o al gusto
1 cucharadita pimienta negra, o al gusto
3/4 taza de mantequilla fría, picada
2 cucharadas crema espesa
En un procesador de alimentos, pulverizar yemas, harina, queso parmesano, sal, y pimienta. Agregar la mantequilla y el mezclar hasta que alcance una textura de harina gruesa. Agregar la crema y mexclar hasta que la masa forme una bola. Extender la masa entre 2 hojas de papel para hornear hasta 1/2 pulgada de espesor. Colocar la masa, todavía en el papel, en una bandeja de hornear y congelarla 10 minutos. Retirar la hoja de papel superior y hornear 10 minutos a 350F. Retirar del horno, cortar la masa en rombos de 1 1/2 pulgada, y devolver al horno y hornear hasta que estén doradas, otros 18-20 minutos. Enfriar en una bandeja de hornear colocada en una rejilla de alambre.
Rendimiento: cerca de 6 docenas.
Adaptada de una receta de Bon Appetit.
Algunas recetas más (en inglés) para ayudar a usar todos esos huevos de Pascua:
Colección de recetas de Incredible Egg
Bocadillos de ensalada de huevo al curry
Salsa gribiche, que se puede usar para hacer:
Salvelino con verduras y salsa gribiche
Patatas nuevas con parmesano, pimienta negra, y salsa gribiche
Espárragos y morchellas salteados con salsa gribiche
Tortellini con tocino y huevos
Campanelle con huevos y alcaparras
Y aquí hay un conjunto de recetas para tintes de huevo naturales para empezar el circo.
Quitando las cáscaras
Siendo clientes del Mercado de Agricultores, sin duda habrán notado que esos huevos frescos encantadores suelen aferrarse a sus cáscaras después de hervirse. Un método de evitar este problema (o al menos intentar evitarlo) es comprar los huevos con un mes de anticipación y dejarlos envejecer, o comprarlos en un supermercado donde ya se lo ha hecho. Sin embargo, ya que la producción de huevos aumenta a medida que los pollos reciben más luz del día, habrá más huevos cerca de Pascua, y de todos modos ¿quién quiere comer huevos viejos? Otra opción que sugiere una amiga con gallinas es dejar los huevos fuera de la nevera 1-2 días antes de cocinar, que da un efecto similar y tiene la ventaja de poner los huevos a temperatura ambiente y ayuda a evitar que se rajen cuando se cocinan.
Un truco que me ha salido bien es pelar los huevos tan pronto como estén lo suficientemente fríos para manejar; no, por desgracia, una opción si hay que refrigerar los huevos durante la noche para que se puedan ocultar en la mañana. Esto nos deja con la técnica casi tan eficaz de pelarlos bajo agua corriente templado, con el huevo puesto para hacer que el agua pueda filtrarse entre el huevo y la cáscara. Sí, esto va en contra de todos los consejos de seguridad de los alimentos, así que hay que trabajar con cuidado y considerar el riesgo. Es mejor dejar los huevos encontrados en la nevera hasta el último momento (dándoles varias horas para enfriar de nuevo después de la caza) y trabajar con una olla de agua muy fría a mano en que poner los huevos tan pronto como estén desnudos.
Éste es una traducción de una entrada del blog del Mercado de Agricultores de Tumwater.
Versión en inglés también disponible en Food Bank Foodie